Un anhelo
necesario en una región con valores musicales
Si Piura,
Trujillo, Cusco, Arequipa ya cuentan con Orquestas Sinfónicas… y Lambayeque?
Sin lugar a dudas, nadie puede negar del dinamismo y
potencial económico de la Región Lambayeque, y esto lo comprueban analistas
sobre todo en los sectores agroindustria, comercio y el de construcción; ello
está a la vista con la presencia de todas las marcas financieras, autoservicios,
varias universidades y hasta la invasión
de casinos como en Las Vegas. Pero a pesar de ello, uno de los sectores que no
ha podido consolidarse es el turismo aún teniendo un Plan de Desarrollo Regional.
Esto no se debe solo al inadecuado servicio de algunos hoteles, restaurantes y
falta de operadores sino también por no contar con espacios donde se expresen
las diversas manifestaciones humanas del arte y la cultura, que tanto aprecian
los turistas visitantes. Asimismo por no considerar como importante el tema
cultural y educativo en los planes de desarrollo, y la falta de compromiso e
identificación de autoridades y ciudadanos.
Por ejemplo, Lambayeque cuenta, hace 53 años, con una Escuela
Regional de Música con 22 profesores y casi 200 alumnos, sin embargo no ha
podido, hasta la fecha, conformar una Orquesta Sinfónica ni una de Cámara por
no haber conseguido los recursos para poder financiarla. Ni siquiera ha logrado
ser un punto de encuentro de cultura musical. Lo que difiere de otras ciudades
como el Cusco, Arequipa, Trujillo y Piura que ya cuentan con Orquestas
Sinfónicas solventadas tanto por el Ministerio de Cultura (DDC) o por la
Municipalidad, como el caso de Piura. Pero, es gracias a la gestión de sus
autoridades y al respaldo incondicional del empresariado que viene auspiciando
para que se sostengan.
Sin embargo, en Lambayeque hay quienes insistimos en producir
cultura porque estamos convencidos que es la base del desarrollo del ser humano
y de nuestra sociedad. Así piensa el profesor de música Martín Waltersdorfer
Mendoza, cuando nos cuenta, con entusiasmo, de su nuevo proyecto personal
del 2014 y es la formación de una
Orquesta de Cámara Juvenil, que la integrarán 16 jóvenes entre los 16 y 24 años
de edad, que son músicos de cuerda de buen nivel en violines, violas y
violonchelos.
El profesor nos informa que conformar la orquesta implica un
costo alto, por ello necesitará el apoyo de autoridades y sobre todo del
auspicio del empresariado. Nos detalla que las ciudades antes mencionadas para
poder sostener sus orquestas sinfónicas invierten 15,000 soles mensuales en el
pago de músicos profesionales. Por tal motivo decidió iniciar una orquesta de
cámara pequeña con un requerimiento de 400 soles mensuales para los ensayos,
aparte de los requerimientos para sostener los instrumentos, pero esperan
lograr cubrirlo con los diversos conciertos que darán en unos meses. Y así, poco
a poco, lograr una gran Orquesta de Cámara que alcance las exigencias de las
grandes obras musicales.
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